Los viajes largos en el coche pueden suponer un problema para tu seguridad si no estás bien preparado. Es necesario que hagas una planificación mínima para que no haya imprevistos en cuanto a revisiones y a mantenimiento. Pon a punto tu vehículo y comprueba los puntos más importantes antes de emprender el viaje y para poder disfrutarlo.
Neumáticos
Los neumáticos son una parte de tu coche que siempre necesita un correcto mantenimiento, pero más aún si se hacen largos viajes en los que los niveles de exigencia son altos. A lo largo del camino puedes encontrarte carreteras en mal estado, objetos inesperados o incluso el desgaste por la falta de una buena revisión. Por lo tanto, si vas a hacer un viaje largo, revisa que tus neumáticos no estén caducados, que no estén desgastados y que la presión sea la adecuada.
Los frenos
No sabemos los imprevistos que podemos encontrarnos en la carretera, por eso tener los frenos en plena forma es esencial para conducir seguros. Sin frenos no puede haber una conducción segura, por eso hay que hacer una revisión a fondo de forma previa. Todo el sistema debe de estar a punto, tanto si has notado vibraciones o ruidos raros, como si no has notado ningún cambio: presta especial atención a piezas que tienden al desgaste como los discos o las pastillas.
Los amortiguadores
Los amortiguadores hacen que los trayectos sean cómodos, sin sobresaltos y constantes. Aunque es recomendable una revisión anual, acude a tu taller de forma previa al viaje y evalúa si hay que cambiarlos o simplemente revisarlos.
Las luces
Las luces del coche son las que alertan al resto de los conductores de nuestras intenciones y de nuestra posición en carretera. Comprueba que funcionan todas ellas, que no haya ninguna fundida y que estén a la altura correcta. Te recomendamos que lleves algún recambio y las herramientas necesarias para solventar el problema puntualmente.
La batería
La batería es uno de los corazones del coche, ya que da vida a todos los elementos eléctricos del vehículo y también la parte que da el impulso directo al arranque del motor. La batería debe de estar siempre cargada, porque sin ella no podremos mover el coche: algunos de los síntomas más frecuentes que indican un problema en esta pieza son fallos en la radio, fallos en las luces, problemas en el momento del arranque.
Para su mantenimiento es importante que sepas que la batería se gasta incluso si tu coche lleva mucho tiempo parado. Además, es conveniente que la desconectes si tienes previsto no utilizar tu coche. Las baterías del coche tienen una vida de 3 a 5 años, aunque eso depende del lugar en el que guardes el coche y también del mantenimiento que le des.
Los líquidos
Los líquidos que lleva tu coche cumplen una función esencial de lubricación, lo que permite que las piezas funcionen correctamente sin desgastes. Controla los niveles de aceite, pero también el agua, el limpiaparabrisas, el líquido de refrigeración e incluso los líquidos de dirección, Estos garantizan un buen funcionamiento del coche de forma generalizada.
Documentación
Una parte que hay que recordar es la de llevar encima en cada viaje toda la documentación obligatoria: DNI, carnet de conducir y seguro en vigencia. También es buena idea que revises los triángulos y el chaleco antes de salir, por si en el camino se te presenta algún imprevisto.