El aceite es un componente fundamental para garantizar el buen funcionamiento del motor y su durabilidad. Un aceite de mala calidad o unos periodos de sustitución muy prolongados podrían poner en riesgo la salud de piezas muy sensibles del mismo, con el consiguiente riesgo de avería.
Más allá de la calidad o de los plazos de mantenimiento, a la redacción nos llegan multitud de consultas acerca de la temperatura óptima del aceite motor para cumplir con sus objetivos de lubricación.
¿Qué temperatura ha de tener el aceite para lubricar correctamente?
La temperatura del aceite de un coche se correlaciona bastante bien con la del agua, y siempre suele ser un poco superior a la de esta. Es decir, el aceite se calienta un poco más deprisa que el agua, y mantiene una temperatura levemente superior. Por eso, el termómetro del agua es un buen indicador de la temperatura de servicio del motor y, como puedes ver, en cuanto el agua se sitúa por encima de los 60 grados, se puede considerar que el coche está caliente.
Lo que sí es un factor importante es la velocidad a la que se calienta el motor. Los motores modernos alcanzan la temperatura de régimen terriblemente rápido -menos de 10 minutos-, mientras que los antiguos son más perezosos. En estos últimos propulsores es importante tenerles un poco de paciencia antes de acelerar a fondo o alcanzar altas vueltas -más del 50% del recorrido del acelerador o del régimen máximo-.